el adolescente ante las tecnologías de la informaciÓn
y la comunicación: internet, movil y videojuegos
La
sociedad moderna es una sumamente tecnológica, el internet, los videojuegos,
los teléfonos móviles influyen en la forma de socialización, en especial en la
de los adolescentes. La adolescencia
dado que es una etapa de muchos cambios en el individuo merece mucha atención
respecto a la forma que la tecnología se apodera de su vida. Los adolescentes han encontrado en la tecnología
una forma de comunicarse, de aprender, de satisfacer sus curiosidades y
divertirse. Pero la tecnología puede resultar adictiva en esta
etapa del ciclo de vida, inclusive el diagnóstico de la adicción a la
tecnología de la información parte del mismo principio que las adicciones a
substancias controladas.
El
uso que hace el adolescente del internet puede ser problemático cuando el
número de horas de conexión afecta el desarrollo de la vida cotidiana,
causándole somnolencia, alteración del estado de ánimo, reducción de las horas
dedicadas al estudio o sus obligaciones. El
uso excesivo del teléfono móvil altera la forma de relacionarse del
adolescente, muchas veces éste está más pendiente de las relaciones
telefónicas, que de las relaciones personales, por lo que afecta la manera de
socializarse.
En
cuanto a los videojuegos los chicos están más interesados en este tipo de
tecnología que las chicas. El uso
excesivo de los videojuegos puede ocasionar bajo rendimiento escolar, tensiones
familiares, alteración de conducta y reducción de las relaciones sociales. Este tipo de adicción no aplica sólo a los
adolescentes, personas en etapa adulta han desarrollado adicción a este tipo de
tecnología, en especial al celular, ya que además de utilizarlo para comunicarse,
lo utilizan de agenda.
El
uso de los avances tecnológicos en muchas ocasiones nos facilita la vida pero
es como todo, el exceso es los que hace daño.
Este exceso en los adolescentes puede ocasionar grandes problemas, como
adicción, cambio en el estado de ánimo, dificultad para socializarse.
Es necesario estar sumamente alerta sobre el
uso que el adolescente le da a la tecnología, ya sea al internet, al teléfono
móvil o a los videojuegos. La
orientación es de suma importancia para prevenir cualquier problema relacionado
con el uso excesivo de cualquiera de estas tecnologías.
La
adicción a la tecnología pueda alterar el desarrollo del adolescente, ya sea
físico, cognitivo y social, alterando sus estados de ánimo, su manera de
relacionarse, lo lleva a tener una vida sedentaria y por ende a desarrollar
condiciones de salud que alteran su crecimiento.
Aunque
es cierto que los videojuegos tienen argumentos favorables como el entretenimiento, el estímulo de la
coordinación, promueven procesos cognitivos complejos como atención, percepción
visual, memoria y secuencia de información, se adquieren estrategias para
“aprender a aprender” en entornos nuevos, refuerza el sentido del dominio y
control personal, reducción de otras conductas problemáticas, potencian la
autoestima y facilitan las relaciones sociales entre los jugadores; también es
cierto que en esta etapa el adolescente debe desarrollar otras destrezas como
la lectura de temas propios de su edad y llevar a cabo algún deporte que le
ayude en un sano desarrollo físico.
En
la etapa de la adolescencia el desarrollo social es de suma importancia, ya que
están en busca de su identidad, la concepción coherente del yo, formada por
metas, valores, creencias. Por lo que no pueden limitar su vida al uso de la
tecnología para relacionarse. Tiene que
socializar con la familia, con los iguales y personas externas de la familia
para desarrollar su propio criterio del mundo en que vive.
Lo
importante es que uno como padre de un adolescente este pendiente del uso que
nuestros hijos le dan a este tipo de tecnología, que los orientemos y busquemos
ayuda profesional de entenderlo necesario.
Los
padres de los adolescentes debemos estar al tanto de literatura de esta
naturaleza que nos ayuda a reconocer a lo que se exponen nuestros hijos y poder
orientarlos y tomar medidas preventivas y poder guiarlos y ayudarlos en su
desarrollo, tanto físico, cognitivo y social.